BORIS YELTSIN

Luego de la gloriosa caída en noviembre del 89 del “Muro de la Vergüenza” en Berlin, los años 90 trajeron a los amantes de la libertad, la gran noticia del desmantelamiento de la URRS, la Unión de Republicas Soviéticas. Hace pocos días, ha muerto su artífice, Boris Yeltsin. Quizás por su arrojo y falta de prudencia puedo hacer lo que hizo, convertir una maquina de masacrar al hombre en una serie de republicas que buscan, aunque no siempre encuentren, el beneficio del hombre en la libertad. Yeltsin, sin piedad hacia el comunismo que lo educó, se aferró a la democracia para llegar al poder, y desde allí liberó el comercio, los precios e implantó la propiedad privada, y auque se le critique haber dejado innumerables frentes nacionalistas abiertos, no se puede pedir más a un solo gobierno. Debo reconocer que yo en los años 90 tenia una visión estrecha del mundo y solo veía como un peligro frente a la libertad, al comunismo marxista, creyendo que muerta la URRS y con ella la Guerra Fría, el camino de la libertad estaba despejado. Veinticinco años después reconozco mi error. Las naciones libres aun sigue amenazadas por los que insisten en amordazar y someter la voluntad soberana de cada uno de nosotros y con el afán de no caer en la autocomplacencia, los hombres libre debemos recordar a Boris Yeltsin.