LAS FRASES PELIGROSAS

Vivencias vividas (1)

Los refranes son dichos populares que por lo general encierran una gran dosis de sentido práctico y saludable respecto hacia la vida; pero hay otros que se las traen. Quien no ha escuchado ¡desde niño! la nociva frase “desconfía y acertaras” o su equivalente “piensa mal y acertaras”; y quien puede decir que no la usa en ocasiones.
Pues bien, si uno es conciente de lo que está diciendo, y lo repite como una gracia (vaya la gracia) vale, pero si en realidad nos lo creemos y peor aun, si practicamos esa conducta, lo siento, pero al que ello le ocurre …. que reflexione, pus quizas no esté en el buen camino. La maldita frase no solo es nociva en sí misma por lo que encierra y nos tramite, desconfianza, recelo, prejuicios, sino porque además, ¡lo asegura tajantemente y lo generaliza!. Terrible.
Es posible que alguna vez alguien nos traicione o engañe, pero no por ello debemos extender esa conducta a todo el universo. Tampoco se trata de dejarnos llevar por la desidia y comportarnos como unos ingenuos, para lo cual debemos estar “confiando atentamente”. De lo que no hay dudas es que es mas saludable vivir confiando que ser un desconfiado compulsivo. Hay un proverbio que dice: "La primera vez que tú me engañes, la culpa es tuya; pero la segunda vez, la culpa es mía". Pobre de los que viven desconfiando, pues al infierno lo padecen en vida.