El fin de semana en una casa rural para otoño y primavera, es un clásico para el grupo de amigos que nació hace ya algunos años en el trabajo. Hoy ya no es así, laboralmente estamos dispersos, pero la amistad continua y la costumbre de “ir de cada rural” también, y ya vamos por la docena .....
Pero la renovación también se impone, y como ven en las fotos, tenemos caras nuevas, sabía fresca con Marta la “picola” del equipo y para mí, la satisfacción de tener esta vez la compañía de Lily. Pero hubo más novedades y noticias…. Esperanza y Carlos nos comunicaron que se casan ¡enhorabuena!, y nos alegramos muchísimo por tan estupenda decisión.
De paseo por el campo o por el mar, recorriendo pueblos, visitando la cueva de Zara y siempre disfrutando con los amigos junto a la mesa, comida y bebidas mediante, el fin de semana ¡FUE SENSACIONAL!.
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