viernes, 24 de abril de 2009

QUE DIFÍCIL SE ME HACE

Que difícil se me hace
mantenerme en este viaje
sin saber a donde voy en realidad
si es de ida o de vuelta
si el fulgor es la primera
si volver es una forma de llegar


Así nos cuenta en una hermosa canción Alejandro Lerner, como él ve algo tan natural y a la vez tan complejo cual es saber adonde vamos en la vida. Adolfo Bucal en Las tres Preguntas, nos da pistas para descubrir Quienes soy, Adonde voy, con Quien voy. Y podría seguir citando referencias sobre la vida que desde siempre se han planteado, desde poetas a filósofos, pasando por cada uno de nosotros.
Particularmente ante semejantes cuestiones, tengo incertidumbres y altibajos, y cuando creo haber encontrado una respuesta en la que me siento seguro y contento, ocurre algo que lo tuerce todo.
Y es que por más que nos empeñemos en ser nosotros mismos el centro de nuestra de nuestra vida y tener en nuestras manos las decisiones y el gobierno de los sentimientos, no podemos abstraernos del mundo que nos rodea. Estamos en un sistema en donde la convivencia, familia, trabajo, grupos, sociedad lo condicionan casi todo, y para abstraernos del medio que nos rodea o nos comportamos como unos insensibles egoístas, o estamos sujetos a que nuestro destino vibre al compás de los que nos contienen.
Difícil tarea la de encontrar el límite entre el amor propio y el amor compartido; entre la custodia de mi forma de ser y la aceptación del universo de los demás.

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